En asamblea recientemente realizada se dio a conocer la intención.
La asamblea del Deportes Tolima efectuada en el transcurso de la semana hubiese sido de trámite, por las quejas y preocupaciones de la falta de taquillas, mas ahora que se paga más por el alquiler del estadio, así como por cosas positivas como la construcción de la sede, pero un hecho para destacar tiene que ver con algo que ya Gabriel Camargo Salamanca presidente y mayor accionista del club había dejado entrever, y es que la entidad pasaría a nuevas manos, unas pequeñas, tiernas e ilusionadas manos y un corazón que ya palpita por el vino tinto y oro…..si el nieto de don Gabriel, el hijo de Cesar, el niño Alejandro Camargo legalmente ya podría empezar a tener el gran paquete accionario de la familia.
Herencia directa que se ganó por sus visitas al Manuel Murillo Toro, al estadio de Techo mientas se jugó allí, o en otras partes donde pide ir muy a pesar de sus tareas escolares.
Claro que como todo niño su primer deseo expresado fue ser futbolista, y del Deportes Tolima, el camino de su familia lo lleva a la parte directiva, pero será el destino que dirá, si en una de esas se convierte en uno de los escasos y excéntricos presidentes o dueños del club que al menos una vez o muchas por qué no, se meten en un picadito, partido, o competencia y se dan ese gusto.
Lo que si esta dentro del plan es que la familia Camargo, sinónimo de conjuntos competitivos, cumplidores de sus tareas, continuara con el Tolima, para disfrute igualmente de nuevas generaciones que quieren la segunda, la tercera y otras estrellas para el escudo del representativo pijao. Empezó a enamorarse del vino tinto y oro.